La primera visita a Almería del Embajador de la República de Mali en España, Abdrahamame Baby, ha tenido como protagonista a EUROSOL ya que ha sido la empresa hortofurtícula con producción 100% integrada, seleccionada para conocer en primera persona cómo trabajan sus compatriotas en el sector productivo más importante de nuestra provincia, la agricultura intensiva.

Las instalaciones de EUROSOL, en el municipio de Níjar, han sido el lugar en el que se desarrollaba el encuentro durante la mañana del pasado sábado, una visita en la que en todo momento estuvo acompañado por el cónsul honorario de la República de Mali, Juan Carlos Lago Suárez y la dirección de EUROSOL.

El encargado de fincas en Eurosol, Adama Dien, profesional en la empresa desde el año 2006 y maliense, ha sido el encargado de conducir a los representantes institucionales durante toda la visita, la cual arrancaba por los invernaderos en los que en la actualidad trabajan 150 profesionales naturales de Mali y a los que ha podido saludar y preguntar la labores concretas de su jornada. A las doce en punto, concluida la jornada laboral los trabajadores han dado la bienvenida al embajador con un rezo tradicional de su país, para a partir de ese momento charlar sobre su situación en Almería.

Nuestra provincia cuenta en la actualidad con 3.885 malienses censados, siendo el 91,58% hombres y el 8,42% mujeres, en su conjunto tienen presencia en un total de 11 municipios de la provincia. La presidenta de la Asociación de Mujeres de Mali, Maimuna Sakba, también presente en este encuentro como otra de las profesionales que trabaja en EUROSOL, y ha expresado su gratitud a la empresa por provocar este encuentro institucional tan enriquecedor. Por su parte, el embajador ha felicitado a EUROSOL por promover la integración y la cultura maliense y permitir la estabilidad tanto personal como laboral de las 150 personas que a diario ejercen su labor en esta empresa almeriense. “Gracias por ser una gran empresa para nuestros compatriotas”, concluía Baby.

El encuentro ha concluido con una comida en la que no ha faltado el tomate cultivado en las fincas de EUROSOL, el arroz y una tarta decorada con la bandera de Mali.