La Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas, COAG, de Almería, advierte de que las persistentes lluvias registradas en la provincia de Almería durante el mes de marzo están causando ya daños en algunos cultivos, destacando especialmente los hortícolas, tanto al aire libre, como de invernadero, como brócoli, pepino, pimiento o sandía y melón.

Las intensas lluvias de este comienzo de primavera, con más de 100 litros de agua registrados en determinados puntos de la provincia, están, por un lado, dando un respiro a las reservas hídricas de embalses y pantanos (aunque, según los últimos datos, continúan a solo el 10% de su capacidad); y por otro lado ocasionando ya daños en distintos cultivos. Así, lo hortícolas se están viendo afectados por los altos niveles de humedad que traen consigo la proliferación de plagas y enfermedades, como la botrytis o el mildio, dando paso así a síntomas de pudrición en las plantas. De la misma forma, resulta preocupante lo ocurrido con los cultivos de sandía y melón pues al encontrarse en plena fase de polinización, la amenaza se cierne de forma más patente al verse afectada por episodios, súbitos y alternos, de humedad - calor en las últimas semanas.

“Los problemas derivados de estas lluvias, continuadas e intensas, que se vienen dando este mes, no parece que vayan a remitir pues se estima que van a continuar algunos días más la semana próxima. Y ya están apareciendo daños en algunos cultivos, derivados de la humedad, en forma de enfermedades, sobre todo botrytis y pudrición”, explica Andrés Góngora, secretario Provincial de COAG Almería.

Preocupación por la campaña de sandía y melón

Así se percibe en el ambiente entre agricultores/as una preocupación generalizada por el cultivo de sandía y melón, que se encuentra en plena fase de polinización, siendo éste un momento especialmente determinante ante determinadas condiciones climatológicas extremas. “Hay que destacar que la polinización de sandía y melón se está viendo seriamente afectada. Se había anunciado un crecimiento de la superficie, pero, a día de hoy, no está claro que ese incremento en el número de hectáreas plantadas lleve aparejado un aumento de la producción. Y es que está ocurriendo un auténtico desastre en algunas explotaciones que tienen ya las colmenas puestas pero cuya polinización en estas condiciones climáticas actuales es prácticamente imposible”, asegura Góngora al realizar un análisis de la situación actual tanto en invernaderos como en cultivos al aire libre.

Más herramientas de contención

De la misma forma, COAG Almería considera que las explotaciones están necesitadas de un mayor espectro de herramientas fitosanitarias con las que poder afrontar situaciones excepcionales como la actual. “Se trataría de medidas excepcionales que podrían ser habilitadas cuando la situación lo requiriese y que resultarían de gran alivio para el/la agricultor/a al ayudarle a afrontar un ambiente tan desafiante para el cultivo, y ante el cual contamos con contados recursos para revertir las condiciones actuales”, razona Andrés Góngora, desde la organización agraria.