Para ello, el IFA subvencionará a empresas de forma directa hasta un treinta y cinco por ciento de la inversión, con ayudas reembolsables hasta el sesenta por ciento de la inversión subvencionable y con una bonificación de intereses de hasta cinco puntos. Ninguna de estas subvenciones podrán superar la cuantía de 600.000 euros. Estas ayudas serán para empresas ya existentes o de nueva creación. Las subvenciones podrán estar destinadas tanto a gastos de constitución y primer establecimiento, como a los activos materiales e inmateriales. Además, otros conceptos subvencionables son los gastos de servicios externos para la mejora de la competitividad y los gastos internos de personal y suplementarios. A través de este impulso se quiere propiciar un clima favorable a la incorporación de esta nueva tecnología aprovechando los avances de la investigación almeriense relacionada con los alimentos, contribuir al desarrollo competitivo de empresas agroalimentarias en el interior de la provincia, así como, desarrollar en Almería un sector industrial y tecnológico con perspectivas de crecimiento. Con la consecución de esta acción de fomento, el sector agroalimentario de Almería podrá satisfacer las necesidades de los mercados actuales a través de una marca bien posicionada, un envase atractivo o funcional, una certificación de calidad y seguridad alimentaria, un soporte adicional de vitaminas o una mayor longevidad son características que el consumidor demanda y valora. Por tanto, las innovaciones tecnológicas, que ayudan a diferenciar un producto ante el consumidor, pasarán a ser un valor de progreso del sector agroalimentario almeriense. M. Belén Garre ir a investigación