Las hortalizas llevan un compuesto llamado caroteno, pigmento responsable de la coloración amarilla, verde, roja o naranja de las mismas, que favorece e incrementa la comunicación entre las células, lo que es una prueba fehaciente de que estos alimentos pueden ayudar a prevenir ciertos tipos de cáncer, según han determinado un grupo de expertos de la Universidad de Hawai. De este modo, lo que los carotenos hacen es incrementar la actividad de una molécula llamada ‘conexina 43’ que forma pequeños canales entre las células y conecta virtualmente todas las células del cuerpo. Las células que padecen tumores han perdido la capacidad de comunicarse y se han aislado de sus células vecinas. Así, a través de estos canales las células intercambiarían nutrientes y muchos signos vitales que aseguran su normal crecimiento. El equipo de expertos de la Universidad de Hawai ha tratado tres tipos diferentes de tumores con carotenos, en cultivo celular y en animales y en ambos casos la comunicación entre las células se restablece y éstas se comportan más normalmente. Por otro lado, lo científicos está ahora estudiando varias fórmulas de carotenos solubles en agua, ya que, el cuerpo humano no absorbe bien todos los carotenos.