El cumplimiento de las normas mínimas en materia medioambiental, higiene y bienestar de los animales; la mejora de las condiciones de las explotaciones ganaderas y la compra de tierras para adecuar las estructuras productivas, son igualmente actuaciones subvencionables a través de estos planes. Según la normativa que regula estas ayudas, el porcentaje de inversión subvencionable es del 50 y 40% respectivamente, dependiendo de sí la explotación está ubicada en zona desfavorecida o en otras zonas. El volumen de inversión objeto de ayuda es de 90.151 euros por Unidad de Trabajo Agraria acreditada (UTA), con un máximo de 180.303 euros por explotación. En el caso de explotaciones de agricultura intensiva pueden subvencionarse inversiones de hasta 601.012 euros. Asimismo, se han aprobado 149 expedientes de solicitudes de ayudas por importe total de 5,8 millones destinados a apoyar e incentivar a los jóvenes a incorporarse al sector agrario. De este importe, 1,9 millones son de subvención directa y 3,9 de bonificación de intereses de 146 préstamos solicitados por los beneficiarios, por un capital de 16,1 millones para auxiliar sus inversiones. Compromiso Las ayudas a jóvenes menores de 40 años tiene como finalidad auxiliar gastos e inversiones derivados de la incorporación a la actividad agraria, a través de apoyos directos y bonificación de intereses de préstamos bancarios. Para acceder a las mismas se exige, entre otros requisitos, el compromiso de ejercer la actividad agraria durante cinco años desde que se resuelve favorablemente la ayuda. Asimismo, la explotación debe cumplir las normas comunitarias vigentes en materia de medio ambiente e higiene y bienestar de los animales. Estas ayudas a jóvenes agricultores son complementadas por la Junta de Andalucía con una subvención directa de un máximo de 25.000 euros. Esta cantidad se suma a los 15.025 euros previstos para la bonificación de intereses y primas únicas, respectivamente. Con este respaldo económico se pretende facilitar el relevo generacional en el campo