La combinación de tratamientos pre y postcosecha permitirá aumentar la conservación de la calidad de las hortalizas frescas

La Estación Experimental de Cajamar ‘Las Palmerillas’ y Coexphal celebraron ayer una jornada técnica, que contó con una gran asistencia de técnicos, ingenieros agrónomos y agricultores, sobre los tratamientos postcosecha encaminados a aumentar la conservación de las propiedades y características de las frutas y hortalizas frescas. La investigadora del CEBAS-CSIC de Murcia, Ana Allende expuso algunas de las últimas tecnologías que están introduciendo las empresas de productos en fresco como la molécula 1-MPC, Metilciclopropeno, que es un perfecto inhibidor de Etileno, los tratamientos de calor a través de radio frecuencia, la aplicación de ozono tanto gaseoso como acuoso, la aplicación de radiaciones ultravioleta y la aplicación de atmósferas modificadas sobreoxigenadas. Por su parte, Juan Antonio Tudela, del departamento de ciencia y tecnología de alimentos del CEBAS-CSIC de Murcia intervino para explicar que la máxima calidad postrecolección sólo puede alcanzarse conociendo y manejando adecuadamente los distintos factores precosecha que afectan a la calidad postrecolección de los productos hortofrutícolas. Según este experto, los principales factores que hay que tener en cuenta para mantener la calidad son el tipo de variedad, la nutrición mineral, el nitrógeno, el calcio y el riego así como diversas prácticas culturales como el aclareo.

Además de las técnicas postcosecha para la conservación de los frutos, Dolores Fernández, responsable de aplicaciones agroalimentarias de la empresa Air Liquide dedicada a la aplicación de gases para la conservación de productos hortofrutícolas, indicó que el envasado en atmósfera modifica. Este tratamiento proporciona al consumidor un producto hortícola muy parecido al fresco con una vida útil prolongada y al mismo tiempo garantizar la seguridad de los productos manteniendo una sólida calidad nutritiva y sensorial. Fernández presentó además, un nuevo producto, Argón para envasado en atmósfera modificada que mejora las características en la prevención de la degradación oxidativa de productos alimenticios y funciona eliminando el oxígeno de forma eficaz, debido a sus propiedades físicas con alta densidad y solubilidad. Los tratamientos pre y postcosecha están encaminados para mantener y mejora la calidad de los productos hortícolas. En esta calidad priman la apariencia visual del frutos por encima de todo, la textura o firmeza del mismo, el sabor y el aroma, los valores nutricionales de las frutas y hortalizas a los que cada vez el consumidor les está dando más importancia y la seguridad en cuanto a la presencia de productos químicos y la contaminación microbiana. Todos estos aspectos son los que un producto tiene que mantener intactos desde su recolección hasta la llegada a la mesa del consumidor. Otro de los puntos que se trataron en las jornadas fueron las nuevas tendencias en IV gama que son frutas y hortalizas frescas peladas y/o cortadas en un producto 100% utilizable y envasado para ofrecer al consumidor un producto fresco, saludable, cómodo y con todo su sabor. Actualmente, existen dos tendencias de productos IV gama los que están listos para su consumo y los que están preparados para cocinarlos. María Ángeles Conesa ingeniero agrónomo de CEBAS-CSIC destacó que los objetivos futuros de los productos de IV gama son reducir la velocidad de pardeamiento y ablandamiento, la selección de variedades que reúnan sabor, aroma y contenido nutricional además de reducir el uso de agentes químicos y los riegos microbiológicos. M. Belén Garre