La cooperativa de segundo grado Anecoop ha dado a conocer su última novedad, se trata de una sandía de tamaño mini sin semillas. Este tipo de fruto ofrece numerosas ventajas al consumidor, ya que cuenta con una piel más delgada lo que conlleva un mejor aprovechamiento del producto y presenta entre uno y dos grados brix más que la sandía normal reina de corazones. Sus ventajas a simple vista es la facilidad de su transporte, ya que su peso ronda los tres kilos, pudiéndose degustar en dos o tres sesiones incluso ser ingerida en una única ocasión por una familia compuesta por tres miembros. Sin embargo, "existe un gran número de consumidores que piensan que para que una sandía tenga calidad gustativa debe presentar pepitas", aclara Borrás, quien hace referencia al esfuerzo que supone la introducción de un nuevo producto en el mercado, tradicionalmente acostumbrado a consumir el mismo tipo de fruta. A esto se añade las exigencias de los supermercados, que demandan unos determinados calibres y un suministro continuado, lo que conlleva unos elevados costes de producción. Con el objetivo de conseguir un producto más rentable para el productor, las casas de semillas están llevando a cabo ensayos con hibridaciones para lograr una mayor rentabilidad y productividad. En el caso de Anecoop está trabajando en estrecha colaboración con Syngenta para obtener unas semillas más productivas de mini sandías sin pepitas.