La Estación Experimental de Cajamar ‘Las Palmerillas’ ha realizado un estudio sobre la ‘Influencia de las ventanas laterales sobre la ventilación natural en invernaderos tipo parral’. Los resultados del estudio determinan que la combinación de ventanas laterales y cenitales sin malla, consigue tasas de renovación aceptables, que son, según los expertos, por encima de treinta renovaciones por hora a velocidades razonables, para mantener unas condiciones ambientales adecuadas para el cultivo. La contribución de la ventilación lateral, en el caso de ventanas enrollables, es superior o del mismo orden de magnitud que la central por unidad de superficie abierta. Esta contribución decrece al aumentar la anchura del invernadero, estimándose que para invernaderos de más de treinta y cinco metros de anchura, el proceso de ventilación depende en mayor medida de la ventilación cenital. La ventilación de los invernaderos es muy importante para una óptimo desarrollo de los cultivos, así, una tasa de ventilación deficiente incide negativamente por los excesos térmicos e influye sobre la composición del aire interior, principalmente al producirse déficit en la concentración de CO2. Este hecho, también provoca exceso de humedad que incrementa la condensación en la cara interior de las cubiertas y el goteo sobre el cultivo.