El Gobierno también va a destinar dieciocho millones de euros al plan Renove, como subvención directa a la compra de nueva maquinaria, desechando la antigua, con lo que se favorecerá el ahorro energético, la seguridad en el trabajo y el respeto al medio ambiente. Otros treinta millones de Euros se vinculan a repercusiones de IVA de ayudas comunitarias. Las medidas planteadas a las OPAs y cooperativas se sitúan por encima de las ofrecidas por otros países europeos y de las demandadas por los agricultores de esos mismos países. El Gobierno es consciente de que no se debe retrasar su actuación y aunque un acuerdo sobre las medidas sería deseable es más importante que los agricultores reciban apoyo. Las medidas que el Gobierno se propone poner en práctica representan un gran esfuerzo presupuestario hacia los agricultores, ante un problema al que se enfrenta toda la sociedad. En este sentido, el MAPA ha llegado a un acuerdo sobre el mismo problema con las organizaciones pesqueras, cuya responsabilidad y esfuerzo han sido reconocidos en la negociación. Por otra parte, el Gobierno va a crear una mesa interministerial entre los departamentos de Agricultura, Pesca y Alimentación e Industria, Comercio y Turismo, para dar solución a la distribución de carburantes a terceros por parte de sociedades cooperativas, que ha pesar de haber sido prometida por gobiernos anteriores nunca se ha llegado a poner en práctica. Se constituirá otra mesa con el objetivo de estudiar alternativas al consumo actual de combustibles: ahorro energético, biocarburantes, etc…, en la senda de lo acordado en Kyoto. En las conversaciones con las OPAs los representantes del Gobierno han recordado que el presupuesto para hacer frente a la situación actual no es ilimitado y les ha llamado a actuar en sus demandas con responsabilidad ante la sociedad. ir a agricultura intensiva