Y es que los plátanos son la fruta más exportada a nivel mundial. Así el valor de la producción prevalece sobre la variedad y los agricultores cultivan las tipologías que pueden ser más rentables. Desde la FAO se pide la implantación de una investigación que permita conocer qué especies de plátanos silvestres pueden haber todavía en algunas regiones de la India así como en las selvas del Sudeste Asiático. Potenciar acciones proyectadas a la conservación y centradas en la gestión de la tierra por las poblaciones locales es la fórmula presentada para conseguir el objetivo. Cambiando de escenario desde el GEM se ha puesto en marcha un proyecto que bajo el nombre; ‘Campaña Biodiversidad Doméstica’ y bajo la dirección de Antonio Rubio tiene como objetivo la conservación de la biodiversidad. El motivo que suscitó la necesidad de poner en marcha un plan de estas características fue la «agresividad de la agricultura almeriense, que conlleva a la pérdida de material vegetal». Unas 20 especies han sido ya recuperadas. Un proceso en el que la colaboración de los agricultores y sobre todo de aquellos que conocen los antecedentes vegetales de cada una de las zonas es clave. «Hemos establecido un protocolo de trabajo y a partir de aquí necesitamos la información externa». Izaskum Argemí