A partir de 2005 todos los países desarrollados deberán de eliminar el uso de este potente pesticida en los suelos agrícolas. Conscientes de ello los agricultores de la provincia de Almería han puesto en marcha desde hace varios años múltiples alternativas a la utilización del bromuro de metilo en los invernaderos. Este biocida capaz de controlar los patógenos del suelo que afectan a las plantas es utilizado en muchas zonas productoras de todo el planeta. Para sustituir su uso en suelos se ha optado por alternativas como la solarización y diferentes tratamientos químicos, todos en combinación con un sistema integrado de manejo de plagas. Mediante un riego y una capa de plástico y dejando varios días que actúen los rayos del sol se consiguen los mismos efectos que se obtienen con la fumigación del bromuro de metilo. Las sustancias gaseosas que se producen durante la biodegradación de la materia orgánica que hay bajo el plástico se controlan los patógenos de las plantas, de modo que las plantaciones posteriores no corren peligro de verse afectadas por los residuos vegetales de las anteriores cosechas. El uso de esta técnica junto con el injerto de hortalizas, del que Almería es pionera, ya está viendo resultados positivos. Por este motivo, los invernaderos de la provincia son ejemplo para la eliminación del bromuro de metilo en los cultivos de todo el mundo. De este modo, varios investigadores de la Universidad de Almería actúan como Consultores de Naciones Unidas para el cumplimiento de los programas de eliminación de este pesticida en países como México, Honduras y Guatemala.