Casi dos meses después de la última manifestación organizada por Coag, en la que un millar de vehículos colapsaron el centro de la capital, sólo una minoría de agricultores han conseguido regularizar la situación de sus camiones, con los que ya pueden transportar de forma legal sus productos hasta el punto de comercialización. La inmensa mayoría, aún está pendiente de que los concesionarios accedan a emitir el certificado que les permita modificar la ficha técnica. Andrés Góngora, secretario provincial de Coag, en declaraciones a este periódico, ha manifestado que aunque siguen en contacto con la asociación que integra a los fabricantes de estos camiones, como última alternativa -si éstos no les facilitan el documento que solucione el problema- están estudiando la posibilidad de que estos certificados puedan ser emitidos desde laboratorios privados. Ésta sería la última opción que barajan desde la organización agraria. De todas formas, afirma Góngora, «continuarán presionando a los fabricantes que vendieron los vehículos que son los que deben otorgar la documentación necesaria». En este sentido, al máximo responsable de Coag en la provincia, le consta que la Administración está trabajando en la misma línea. Las reuniones con la Subdelegación se han producido, desde la concentración de mayo, para lograr que todos los afectados puedan conseguir la homologación de sus camiones.