Madrid acogió el pasado jueves la ceremonia simbólica de entrega a las comunidades autónomas de los más de 26.500 millones de euros que la CE ha asignado a España para programas operativos del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) para el periodo 2007-2013. Al acto, que presidió la comisaria europea de Política Regional, Danuta Hübner, asistieron los secretarios de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, y para la Unión Europea, Alberto Navarro, junto con los responsables económicos de las distintas comunidades y de las ciudades de Ceuta y Melilla. El objetivo de estos fondos es financiar los 23 Programas Operativos aprobados por la Comisión Europea para el periodo indicado, uno en cada comunidad autónoma y las ciudades de Ceuta y Melilla. Además, con estas ayudas europeas se pondrán en marcha otros cuatro programas que cubrirán todo el territorio español y que tienen que ver con la investigación al desarrollo e innovación por y para las empresas; la economía del conocimiento, el fondo europeo de Desarrollo Regional y la Asistencia Técnica. Los programas Operativos, que han sido elaborados por el Ministerio de Economía y Hacienda conjuntamente con las comunidades autónomas, son los documentos que recogen las prioridades a las que se destinará la ayuda comunitaria, así como el plan financiero conforme al cual se ejecutará. Andalucía, con más de 6.800 millones de euros, Galicia (con más de 2.100 millones), Castilla La Mancha (con 1.400 millones) y Extremadura (con 1.500 millones) son las comunidades autónomas que más ayuda europea recibirán para el período 2007-2013. Entre las autonomías que recibirán menos dotación económica figuran La Rioja, con 32 millones de euros, Navarra, con 47 millones, y la ciudad de Melilla, con 43 millones. En su discurso, la secretaria de Política Regional ha destacado la importancia de estas ayudas europeas para que todas las regiones puedan converger de una forma "brillante" hasta situarse, como España, ha apuntado, entre "las más avanzadas" de la Unión Europea. Hübner ha subrayado también la voluntad de la Comisión Europea de "aprovechar al máximo" la política regional para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos españoles.