Sin duda este ha sido calificado como el año de la lucha integrada en la provincia de Almería. Un grupo importante de 700 agricultores han dado el paso y este año cultivarán bajo métodos más saludables con las plantas y con los mismo productores. La ventajas de este sistema son bien claras: se evita el uso de fitosanitarios y esto provoca que la planta crezca más sana y el agricultor evita la exposición a los químicos. Otra de las ventajas es que se reduce el uso de la mano de obra lo que, en consecuencia, provoca un ahorro significativo. Las expectativas por el desarrollo de este método antiplaga están en boca de todo el sector productor de frutas y hortalizas almeriense. A estas alturas comienzan a verse los productos en las diferentes subastas del municipio y esto nos indica que ya ha comenzado a rodar la campaña agrícola. Los primeros pasos no están siendo muy satisfactorios. Causa de ello son las inclemencias meteorológicas que sucedieron en la madrugada del 12 de septiembre. Casi 80 litros de agua por metro cuadrado cayeron en el municipio ejidense, cuando lo los índices máximos de los últimos años se acercaban a los 30 litros por metro cuadrado. Las consecuencias de este contratiempo: invernaderos anegados, ramblas destruidas y en algunos casos los agricultores han tenido que limpiar y volver a plantar y por este motivo retrasar la venta de sus producciones. Más de 2.000 hectáreas se vieron afectadas en El Ejido.