Esta cooperativa nace a iniciativa de un grupo de mujeres rurales de una de las zonas más desfavorecidas de la provincia de Almería, Vélez Rubio. Estas mujeres y hombres, de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos –UPA Almería- sólo contaban con ingresos propios a través de la venta de pollos, huevos y pavos, sobre todo en las fechas de navidad. Éstos la mayoría de las veces eran los únicos ingresos de las mujeres en todo el año. Tras una intensa campaña de la organización información y contratiempos, se ha conseguido dar la importancia para el desarrollo rural de la agricultura ecológica y el desarrollo sostenible, las mujeres y hombres de los Vélez y otras comarcas almerienses, se dieron cuenta que contaban con dos productos en sus zonas muy adaptables a la agricultura ecológica: los cereales y los almendros. El proyecto empezó a cuajar cuando desde UPA se transmite la idea de que con una cooperativa de estas características podría mejorar la vida en los pueblos del interior de la provincia y traería una serie de servicios al medio que ayudarían al desarrollo de toda la comarca. En 2001 y gracias al tesón y a las ganas de cambiar las cosas de este grupo de hombres y mujeres, se consigue constituir la Cooperativa AGRUPABIO con 18 mujeres fundadoras y la implicación y participación en el proyecto de 17 hombres. Con 35 socias/os fundadores y mucha ilusión por mejorar la situación agrícola desfavorecida de la comarca arranca a funcionar esta cooperativa. Se empezó a trabajar sobre el cultivo ecológico de cereales y trigo más competitivo y con mayor salida en el mercado, con el objetivo al principio de poner en marcha también otra cooperativa que aglutinara las explotaciones avícolas ecológicas. En el sector de los pollos, pavos y huevos las mujeres ya contaban con su experiencia previa al llevar toda la vida trabajando en este sector. Las mujeres ven la posibilidad de poder dar un valor añadido a otros productos con los cultivos y producciones ecológicas.