El mercurio se ha disparado estos días hasta superar en varios puntos de España los 40 grados, lo que puede provocar importantes problemas de deshidratación, especialmente entre los ancianos, los más pequeños de la casa y las personas enfermas. Por esta razón, la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (Sedca) ha realizado el Libro Blanco de la Hidratación en el que se hace especial hincapié en la importancia de incrementar el consumo de líquidos, bien sea agua, zumo, cerveza, frutas o verduras hasta alcanzar los 2,5 litros diarios. Ésta es la mejor manera de evitar la deshidratación, que puede ser causante de fuertes dolores de cabeza, cansancio o golpes de calor, y que puede llegar a producir enfermedades cardiovasculares e incluso osteoporosis si no se consigue frenar a tiempo. Y es que, durante el verano, el cuerpo llega a perder cerca de tres litros de líquido a través del sudor, la orina o la respiración, por eso es tan importante recuperarlos. El libro señala que “los refrescos no son las bebidas más apropiadas para lograr una óptima hidratación por su alto contenido en azúcares”. Por el contrario, “la cerveza, siempre consumida con moderación, y por adultos sanos, al tratarse de una bebida fermentada a base de agua, cereales y lúpulo también puede catalogarse dentro de las bebidas hidratantes, ya que el 90% de su composición es agua”.