La lechuga ha alcanzado muy buenos precios durante las tres últimas semanas de la campaña, lo que ha permitido, en parte, recuperar las malas cifras de meses anteriores. En este sentido, Fernando Gómez, director general de Proexport señaló que «ha faltado producto en origen y, además, se han retrasado las producciones en destino, lo que ha permitido que los precios se recuperen». Según Gómez, las cajas de calibre diez de lechuga iceberg cotizaron durante los meses de enero, febrero y principios de marzo, cuando los mercados estaban saturados de producto, a precios que rozaban el coste de producción, e incluso, en algunos casos, por debajo de esos costes. Sin embargo, el desabastecimiento posterior ha traído consigo que, a día de hoy, esa misma caja haya pasado de pagarse a 4 euros, de media, a costar unos 8 euros. Con respecto a las causas que han dado lugar a esta situación, el director general de Proexport explicó que se ha debido, sobre todo, a que «las producciones locales comienzan a caer en mayo y, en ese tiempo, todavía no han comenzado a producir en países como Inglaterra o Alemania». Esto provoca que haya un ‘hueco’ casi sin producción. Sin embargo, a todo esto, Antonio Maluenda, director de producción de Primaflor, añadió que la falta de agua en todo el Levante almeriense ha traído consigo que, en esta campaña, se sembrase menos lechuga.