Tras más de cincuenta años, desde que se pusieran en marcha los primeros invernaderos, los productores almerienses se han ido especializando en el cultivo de determinados productos hortofrutícolas. Con el paso del tiempo muchos de ellos se han convertido en verdaderos expertos de una hortaliza. Esta experiencia ha sido heredada por los hijos de estos agricultores que si han tenido la oportunidad de adquirir mayores conocimientos técnicos, que junto con la sabiduría de sus mayores les ha hecho auténticos profesionales del cultivo bajo plástico. Las hortalizas más cultivadas siguen siendo como hace muchos años pimiento y tomate, aunque existe una minoría especializada en el cultivo de otros productos como la judía, pepino, calabacín y berenjena. Este tipo de agricultor es fiel todos los años en su plantación, puesto que conoce bien el manejo que necesita la planta así como los posibles problemas que puedan surgir a lo largo del cultivo. En su afán por mejorar sus producciones, los agricultores asisten a lo largo del año a los diferentes cursos que organizan las asociaciones agrarias y administraciones públicas. Es en verano, cuando muchos de ellos aprovechan para asistir a clase y obtener los carnés y certificados exigidos por la legislación. Ejemplo de ello son los cursos para la obtención del 'Carné de aplicador de plaguicidas', o 'Manipulación de alimentos'. R. Pérez ir a agricultura intensiva