La producción de uva en Almería es casi residual, languidece, cuando antaño esta provincia fue de las principales productoras de España. El rescate de variedades históricas, con y sin pepita, de uva de mesa de Almería mediante la creación de un parral de plantas madres que de sarmientos cuya distribución haga posible que no se pierda y desaparezca las zonas parraleras almerienses tan típicas, hace un siglo, es el objetivo principal de un proyecto de conservación de la biodiversidad de la uva que nace de un concienzudo y pormenorizado trabajo realizado por el Grupo Ecologista Mediterráneo y liderado por el investigador Antonio Rubio. “Antes, el campesino era experto en múltiples cultivos. Ahora la globalización, motiva que un solo hombre tenga experiencia en una sola cosa. Se está perdiendo la historia del cultivo organizado y al aire libre por el de invernadero, rápido y de cantidad”, señaló Rubio que ha invertido cuatro años de arduo trabajo investigador.