El curso ‘El cliente como motor de la innovación’, organizado por la Fundación Tecnova con el apoyo de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa y el patrocinio de la empresa Formatio Post-Grado, ha contado con la participación de una treintena de directivos de empresas de la Industria Auxiliar de la Agricultura. Entre los presentes se encontraban el presidente del Centro Tecnológico de la Industria Auxiliar de la Agricultura, Emilio Martínez, así como la gerente, Mari Carmen Galera. Este curso, que se desarrolló el pasado jueves en Envía Hotel de Vícar, fue impartido por Matilde Martínez, consultora de Orbita 97, que expuso varios casos prácticos para destacar la importancia que los clientes en la innovación de las empresas, haciendo que éstas sean más competitivas y tengan éxito. Matilde Martínez expuso a los presentes las claves y técnicas para que la innovación tenga éxito de mercado y les manifestó que la innovación empresarial “es una prioridad en las empresas que están en mercados altamente competitivos”. Esta experta comentó que innovar “debe verse como una actividad empresarial con características particulares, que puede aplicarse en distintos ámbitos y cuya razón de ser es conseguir novedades competitivas para satisfacer desafíos concretos”. La ponente, asesora de empresas como Novartis, Solvay, Amgen, Iberostar o CIDEM, destacó la importancia creciente que el cliente tiene en la innovación y, en este sentido, expuso varios casos prácticos a través de campañas publicitarias y desde el punto de vista de la experiencia de compra. También se trató la importancia del cliente a través de una perspectiva histórica, durante el siglo XIX y la primera mitad del XX, así como entre los años 1950 y 1970 y desde éste último año y 1990. La ponente abordó asimismo ‘Las Dimensiones del Valor’, que permiten deducir cómo la innovación empieza con la vista, ya que la observación es el primer paso de la innovación.