El Departamento de Control de Plagas de Coexphal, junto con la Universidad de Pamplona, después de varios años de ensayo, ha desarrollado un producto microbiológico que, aunque de modo experimental, ha dado muy buen resultado en la lucha contra la ‘rosquilla verde’. Dada la inexistencia en estos momentos de algún enemigo natural para combatir esta plaga del campo almeriense, se decidió desarrollar este producto microbiológico o, más bien, «una enfermedad natural del gusano», como lo define Jam van der Blom, responsable del Departamento de Control de Plagas de Coexphal. Este virus, al aire libre, comenta van der Blom que «causa una mortalidad muy alta». Pero su principal ventaja es su especificidad, ya que afecta única y exclusivamente a la ‘rosquilla verde’ «y a ningún otro organismo más», concluye el técnico de Coexphal. Este producto ya fue aplicado de forma experimental durante la pasada campaña agrícola sobre una superficie más que significativa y, según Jam van der Blom, «nos ha dado un resultado estupendo». Esto ha provocado que, en estos momentos, tanto Coexphal como la Universidad de Pamplona estén completamente volcados en el proceso de registro del producto. A nivel europeo, según el técnico de Coexphal, «ya está todo resuelto» y añade que «esperamos que para el año que viene lo tengamos registrado aquí y tengamos producción suficiente para abastecer a todo el mercado». De momento, existen algunos otros productos microbiológicos capaces de combatir las plagas de ‘rosquilla verde’. En concreto, existen dos cepas que, según van der Blom, «tratando el cultivo con cierta frecuencia, están dando buenos resultados, pero no siempre se llega con eso».