Las empresas de semilleros han crecido en cuatro años un 54% en la provincia de Almería. Si en 1998, había 35, en 2002 y según la propia información recogida por la Fundación Tecnova, -que aglutina a buena parte del sector de la industria auxiliar de la agricultura-, éstas eran 54. Si este incremento es importante no lo es menos el crecimiento experimentado a nivel de facturación, más de un 72%, al pasar de 31,12 millones de euros a 53,59 en el mismo periodo. Dentro de la industria auxiliar provincial, el subsector de los semilleros representa casi el 20% en número de empresas, si bien este porcentaje se reduce al 7% en cuanto a volumen de facturación. A nivel de empleo, la media de trabajadores por empresa es de doce personas y en conjunto este sector en la provincia da trabajo a 629 personas. Esta proliferación de las industrias de semilleros se debe a que el agricultor almeriense apuesta desde un principio por la calidad y por obtener buenos resultados de sus cosechas para poder satisfacer las necesidades de los consumidores más exigentes. Así cuando un productor deposita sus semillas en un semillero lo hace sabiendo que éste le va a garantizar que germinarán en perfectas condiciones para que una vez transplantada al invernaderos puedan crecer sin problemas y ofrecer frutos sanos, ya que, la primera fase de crecimiento de las plantas es muy importante y de ella depende el desarrollo posterior de las mismas.