La utilización de abejorros como polinizadores en todo tipo de cultivos ha supuesto una revolución en el sector de la horticultura, especialmente en los cultivos bajo plástico. Su aplicación ha supuesto la casi total desaparición de la polinización manual. Aunque la presencia de colmenas de abejorros en las plantaciones de tomate es hoy en día generalizada, es el resultado de un largo proceso de experimentación, mejoras y adaptaciones, proceso que en la actualidad continúa. A escala mundial se han descrito más de 240 especies de abejorros. La mitad de ellas, 120 especies, viven en la región Paleártica (Europa y Norte de Asia). En la región Neártica (Canadá y EE.UU.) vuelan 54 especies. Algo más de 100 especies se encuentran en la región Oriental, la mayoría de ellas al norte de la India, pero alcanzando países como Tailandia. Puede considerarse que más del 70 % de las especies de abejorros viven en zonas de clima templado. Normalmente a los abejorros no les gusta vivir en climas tropicales, con la excepción de 29 especies que se encuentran entre América Central y la costa oeste de Suramérica. El lector atento se habrá dado cuenta a estas alturas que la suma total de las especies de abejorros de diferentes zonas suponen más que el total de especies sobre la Tierra. La razón de ello es que muchas de las especies de abejorros tienen una amplia distribución por el mundo, llegando a solaparse las de diferentes zonas geográficas. Por ejemplo, especies que se encuentran en Asia Central (Área Palaeártica) están igualmente presentes en la India (Área Oriental). En la taxonomía zoológica, los abejorros se incluyen entre los insectos himenópteros (alas en forma de membrana) y se agrupan en el género Bombus, que a su vez se divide en 38 subgéneros. Esta división se basa en la comparación morfológica de partes del cuerpo del abejorro, pero también en base a su genoma. Los científicos están tratando de diseñar un sistema de clasificación en el cual cada subgénero contenga todas las especies que poseen un origen común. Esto se conoce como sistema monofilético, pero aún no se ha conseguido, ya que se necesita mucho tiempo y amplios estudios antes de que el sistema sea aceptado por la comunidad científica. volver a métodos de producción