Los productores de tomate con Indicación Geográfica Protegida de La Cañada-Níjar han manifestado su apoyo a la propuesta de la ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, y su homólogo italiano, Paolo de Castro, para que la dieta mediterránea sea declarada como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, la UNESCO. Los agricultores aglutinados bajo esta indicación geográfica han argumentado que esta medida representaría no sólo un importante impacto cultural y económico para España, sino que supondría también una significativa reducción de problemas como el alto colesterol, la diabetes y otras enfermedades que cada día se propagan más entre la población por la extensión de malos hábitos alimenticios alejados de esta dieta mediterránea. En consecuencia, han abogado por que los productores de hortalizas unan esfuerzos e implementen campañas para difundir el consumo de alimentos sanos, ya que los españoles, según avalan estudios de mercado, ingieren cada vez menos verduras y más grasas, un hábito que repercute en una peor calidad de vida. El tomate de la Cañada-Níjar fue el primero de España en obtener una denominación específica en origen, que comparte el producto de las seis empresas que integran el proyecto, Casur, Costa de Níjar, Vega Cañada, Agrupalmería, Agroponiente Natural Produce y Parque Natural que cuenta con financiación de la Unión Europea y la Junta de Andalucía.