Ambas empresas han decidido unir fuerzas para facilitar la implantación de las técnicas de control biológico de plagas entre los productores que comercializan su cosecha con La Unión Corp. en cualquiera de sus 26 centros de operaciones distribuidos en las provincias de Almería y de Granada.

Además, el convenio de colaboración suscrito entre ambas partes persigue el objetivo de fomentar que los agricultores certifiquen sus producciones bajo los protocolos de la agricultura ecológica. De este modo, se quiere generar más valor a las producciones hortofrutícolas de invernadero y adaptarlas a la demanda real del mercado, al mismo tiempo que se contribuye a mejorar la rentabilidad en origen.

Campaña de sensibilización

Para alcanzar estos objetivos, Koppert y La Unión Corp. trabajarán conjuntamente en una campaña de sensibilización dirigida a los técnicos de campo y a los agricultores, quienes recibirán información técnica para aplicar criterios de sostenibilidad ambiental, social y económica en los cultivos de invernadero. Dentro de esta campaña destacarán los consejos técnicos sobre control biológico que se difundirán conjuntamente a través de las redes sociales.

Koppert valora muy positivamente el inicio de esta etapa de colaboración con La Unión Corp., ya que ambas empresas comparten valores como la solvencia, la apuesta por la máxima calidad, el respeto a la tradición, la innovación permanente y el establecimiento de relaciones duraderas y de confianza con sus clientes. “Se abre una línea de trabajo muy interesante con una empresa líder en la comercialización de frutas y hortalizas. Hay que seguir avanzando en la sostenibilidad de los cultivos de invernadero y para conseguirlo es necesario apostar por el control biológico de plagas porque es la única técnica completamente respetuosa con el medio ambiente y con la salud de los productores y de los consumidores”, según Juan Carlos Rodríguez, director comercial de Koppert en Almería, Granada y Málaga.

Para Jesús Barranco, CEO de La Unión Corp. “este tipo de acuerdos fortalece el modelo agrícola almeriense como ejemplo de sostenibilidad y buenas prácticas. La unión hace la fuerza y esto es un ejemplo más. El control biológico es una realidad en nuestros invernaderos y es necesario para ofrecer al consumidor productos hortofrutícolas de máxima calidad y seguridad alimentaria”.