Dharma y Mandala han sido las dos variedades protagonistas. Este martes 18 se han mostrado en una finca de Las Norias (El Ejido) y el jueves 20 lo harán en otra finca de Pueblo Blanco (Níjar). De esta forma, en una sola visita, los productores han podido comprobar en campo la calidad de estas dos propuestas de la obtentora.

Beatriz Palmero, técnico de desarrollo de calabacín de HM.CLAUSE, ha detallado para FHALMERÍA algunas de las principales característica de estos dos calabacines.

Dharma es un calabacín para siembras tempranas, mientras que Mandala lo es para ciclo intermedio. Ambas variedades tienen una planta muy abierta, de entrenudo intermedio, con hoja de tamaño medio que permite ventilar muy bien y dar buena entrada de luz; todo ello favorece una alta producción.

Por lo que se refiere al fruto, destaca por su buena coservación. Presenta un color verde oscuro, con cierre pistilar pequeño y, en ambos casos, desprenden muy bien la flor.

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Almudena Fernández