Con la llegada de la primavera, los agricultores de invernaderos almerienses se enfrentan a un desafío recurrente: los cambios bruscos de temperaturas. Este fenómeno, que afecta tanto a cultivos de invierno como de primavera, provoca un desarrollo más lento de las plantas y una menor producción, poniendo en riesgo el rendimiento y la rentabilidad de las explotaciones.

Las temperaturas variables son cada vez más habituales durante la primavera y pueden llegar a crear un escenario complejo para los agricultores, ya que promueven la aparición de plagas y enfermedades, entre otras amenazas. Además, cuando las noches registran temperaturas significativamente bajas que contrastan con el aumento de más de 10 grados a mediodía, se provoca un estrés térmico y abiótico que afecta de manera directa al desarrollo de los cultivos.

Esta diferencia térmica provoca alteraciones fisiológicas en las plantas: el frío ralentiza el metabolismo, reduce la actividad fotosintética y dificulta la absorción de nutrientes. Los cultivos más afectados son aquellos que inician su ciclo en primavera, como el melón y la sandía, que ven comprometido su enraizamiento y crecimiento inicial. Sin embargo, los cultivos de invierno como el pimiento, la berenjena y el tomate, también se ven perjudicados puesto que sufren una ralentización en la formación y el engorde de los frutos, afectando a su rendimiento.

Consecuencias económicas y productivas

“A menor producto cosechado, menor oferta en los mercados, lo que puede derivar en un aumento de precios y una reducción de la competitividad de las exportaciones almerienses”, analiza la delegada de Field Marketing de SIPCAM Iberia, Carolina Rodríguez. Asimismo, estas condiciones meteorológicas adversas fomentan el riesgo de aparición de plagas y enfermedades, ya que las plantas debilitadas son más susceptibles a ataques de insectos y patógenos, asegura la experta.

Los bioestimulantes: la solución al estrés

Con el propósito de proteger a los cultivos de los efectos provocados por los contrastes térmicos, la compañía de sanidad vegetal SIPCAM Iberia lanzó al mercado Stilo Hydro: “Una solución diseñada para crear una barrera protectora frente al estrés provocado por la inestabilidad de temperaturas. Su aplicación preventiva permite mantener el ritmo de crecimiento de las plantas y minimizar las pérdidas productivas”, explica el Product Manager Daniel Salgado.

Stilo Hydro es una especialidad nutricional con un marcado efecto protector y corrector del estrés disponible como microgranulado soluble o como concentrado soluble, según las necesidades del profesional agrícola. “Protege frente al estrés hídrico, térmico y salino, lo que lo convierte en un formulado ideal para su uso tanto en periodos de frío como de calor o de sequía”, comenta. “También evita la parada total del cultivo y es apto para agricultura ecológica”, añade.

Blackjak es otro de los bioestimulantes más emblemáticos de la compañía por su composición a base de leonardita 100% natural. “Aplicado vía riego durante todo el ciclo del cultivo, actúa como un potente enraizante, favoreciendo el desarrollo radicular de los cultivos de primavera incluso en condiciones adversas”, manifiesta Salgado. Respecto a los cultivos de invierno, “Blackjak favorece el aumento de producción y el desarrollo del fruto”, afirma. “Además, funciona como carrier para el insecticida-nematicida Adina, lo que facilitará al agricultor el control de plagas aéreas y nematodos en los nuevos cultivos”.

La apuesta de SIPCAM Iberia por soluciones sostenibles y eficaces responde a la creciente necesidad del sector agrícola de adaptarse a fenómenos meteorológicos cada vez más variables. “Con Blackjak y Stilo Hydro, los horticultores almerienses cuentan con herramientas de probada eficacia para mantener la productividad de sus cultivos frente a las inclemencias primaverales”, confirma la experta Carolina Rodríguez. Mientras la inestabilidad de temperaturas sigue siendo un reto, la innovación tecnológica y la investigación en nuevas soluciones de esta compañía permiten transformar esta amenaza en una oportunidad para optimizar el rendimiento y la calidad de las cosechas.

De esta forma, SIPCAM Iberia se posiciona una vez más como un aliado estratégico para los profesionales agrícolas, ofreciendo soluciones adaptadas a sus necesidades reales en un entorno en constante cambio.