Las tendencias de consumo son variables, del consumidor estamos recibiendo constantemente información. “La tendencia de consumo es cambiante y lo que actualmente se están demandando son ‘productos de conveniencia’, que son productos de comida rápida que cumplan con los criterios de alimentación sana y equilibrada”, afirmó Francisco Petit de la comercializadora Agromurgi. Esta nueva tendencia está motivada por cambios socioeconónmicos, la incorporación de la mujer al trabajo, menos tiempo en la compra, preparación y consumo de alimentos, aumento de hogares con una sola persona, pérdida del carácter tradicional y social de la comida, diferencias de horario en el trabajo entre cónyuges y aumentos del tiempo dedicado al descanso frente a la preparación de comidas muy elaboradas. Para Petit el consumidor demanda en los ‘productos de conveniencia’ una serie de características como un aumento del binomio calidad-precio, mayor disponibilidad, buena presencia, que sean ecológicos o legalmente permitidos y socialmente comprometidos. “El producto hortofrutícola tiene una situación de privilegio en cuanto a algunas de estas demandas como es en el caso de la calidad, donde la mayoría de las empresas de Almería son concientes de la importancia de las certificaciones de calidad y las normas de producción. Así, normas como la ISO 9.000, UNE 155.001 con alcance EUREP GAP, ISO 14.000 o el protocolo BRC y el alemán IFS son conocidos por el sector y algunas de ellas ya están implantadas y las otras se están consiguiendo”, afirmó Petit. El sector hortofrutícola de Almería trabaja para conseguir todas estas normativas y lo hace todo enfocado para lograr una mayor satisfacción del cliente, ya que, son normas de voluntario cumplimento. “Las certificaciones de calidad no son una solución sino una herramienta más del trabajo y que pueden configurar respuestas para atender a la gran distribución”, concluyó Petit. Otra de las temáticas de las jornadas fue el control fitosanitario y las posibilidades de utilizar el control biológico en los cultivos de pimiento. Jan van der Blom del Laboratorio de Coexphal indicó que el control biológico en pimiento se aplica con éxito en una superficie significativa en Almería como son cuatrocientas hectáreas. Blom expuso el por qué todavía no se ha podido implantar el control biológico a gran escala en Almería y es por la presencia de trips, mosca blanca, orugas y araña blanca. “La alta densidad de invernaderos hace que los cultivos sean vulnerables a los fitopatógenos que más afectan a la producción. Para frenar la libre distribución de insectos plagas y enfermedades, es imprescindible romper el monocultivo formado por los cultivos hortícolas. Una de las maneras es la plantación de setos que actúan como tiempo para insectos plaga y reservorios par sus enemigos naturales” dijo Jan van der Blom. El ciclo de conferencias sobre la jornada de producción de pimiento también desarrolló la producción de plántulas de pimiento en semillero, el manejo del agua y fertilizantes en cultivo sin suelo, los sistemas de modelización del cultivo bajo cubierta, así como, la actividad de los abejorros, en la polinización y fructificación de flores de pimiento dulce. M. Belén Garre