La Federación Nacional de Exportadores, (Fepex) vuelve a la carga en asuntos relacionados con el acuerdo comercial establecido entre la UE y Marruecos -actualmente en proceso de renovación- insistiendo en la necesidad de incluir cláusulas que salvaguarden la competencia en igualdad de condiciones entre los productos cultivados en el Reino alauita y los que se producen en la Unión Europea. En esta ocasión, Fepex reitera la necesidad de que el protocolo agrícola del Acuerdo de Asociación entre la UE y Marruecos «incluya la obligatoriedad de cumplir la legislación comunitaria sobre uso de productos fitosanitarios, después de que la pasada semana se declarara la alerta sanitaria al ser detectados tomates de Marruecos con restos de un fungicida prohibido en la Unión Europea», informan desde la Federación Nacional.

El Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (Rasff) publicaba recientemente una alerta sanitaria europea , explican desde Fepex, «al detectarse en supermercados de Suecia lotes de tomate marroquí con restos de procimidona, fungicida cuyo uso está prohibido en el cultivo de tomate en la UE desde hace varios años». Esta materia, la procimidona, «es una sustancia activa que en Europa no tiene autorizado su uso en tomate, teniendo fijado un límite máximo de residuos para el producto procedente de fuera de la UE. Esto quiere decir que la Comisión Europea prohibe a los productores europeos el uso de esta sustancia activa en sus cultivos de tomate pero permite que entren en el mercado europeo tomates tratados con dicha sustancia activa, estableciendo un límite máximo de residuos, que debe ser inferior a 0,02 mg/kg. El contenido en procimidona detectado en los tomates marroquíes era de 0,44 mg/kg y 0,51 mg/kilos», aclaran los exportadores nacionales, entre los que se incluye la Asociación de Organizaciones de Productores de Productos Hortofrutícolas (Coexphal).

Para los profesionales dedicados a la exportación de frutas y hortalizas, a la vez que plantas, « se trata de una clara discriminación de los productores de tomate comunitarios en beneficio de los de países terceros, que no están sometidos a la legislación comunitaria». Por este motivo, la Federación Nacional ha decidido pronunciarse al respecto manifestando que considera «imprescindible que se incorpore al Acuerdo entre la UE Y Marruecos el punto quinto de la 'Declaración Institucional en Defensa del Sector Español productor y exportador de frutas y hortalizas' firmada por los Consejeros de Agricultura de Andalucía, Canarias, Comunidad Valenciana y Murcia, en el pasado mes de octubre. En esta declaración, impulsada en su día por Martín Soler, se decía que «ha de exigirse reciprocidad respeto a las condiciones de producción de los terceros países, en cuanto a los aspectos fitosanitarios, medioambientales y sociales, siendo imprescindible incluir esta cuestión en el Acuerdo con Marruecos. De lo contrario supondría una discriminación para los productores españoles en el mercado comunitario».

JOSÉ ESTEBAN RUIZ