Estas jornadas se estructuraron en dos partes: por un lado, la parte teórica donde intervinieron algunos de los principales especialistas nacionales en el tema,  procedentes de Almería, Murcia, Málaga y Valencia entre otros lugares, y otra práctica donde los propios alumnos realizaron las operaciones encaminadas a controlar esta plaga como son la  poda y cirugía de las palmeras, así como los tratamientos fitosanitarios y las sueltas de enemigos naturales.

Las charlas comenzaron con una visión general sobre la situación actual del Picudo rojo en España y en la provincia de Almería a cargo de Francisco J. Fernández Abad, del Dpto. de Sanidad Vegetal de la Universidad de Almería. En esta  ponencia se resumieron, además, la pautas de actuación descritas en la legislación actual para el control de esta plaga a nivel regional, nacional y europeo.

El Catedrático de Entomología de la Universidad de Almería, Tomás Cabello, expuso el ciclo de vida de este insecto, su ecología y las distintas estrategias de supervivencia que presenta el Picudo rojo en función del nivel de infestación de la plaga.

A continuación se presentaron las distintas estrategias recomendadas por la Junta de Andalucía para el control de la plaga, de manos de Gervasio Tapia, investigador del IFAPA La Mojonera. En esta charla se explicaron las experiencias llevadas a cabo por este grupo de investigación para la detección precoz del Picudo, así como las estrategias de control del insecto puestas a punto, tanto químicas como biológicas mediante el uso de nematodos.

Por su parte, Jorge Hernández del Dpto. de I+D+i de Biobest Sistemas Biológicos, describió las estrategias propuestas por esta empresa para el manejo de esta plaga, haciendo especial hincapié en el monitoreo y trampeo masivo, en el control y prevención de la plaga, así como en el manejo sanitario de la palmera una vez que el Picudo está presente.

La importancia de la detección precoz mediante diferentes métodos, detección visual, acústica o química, además del interés del trampeo masivo fue explicada por Pedro P. Pellín, Gerente de Biobest Sistemas Biológicos.

Daniel González, técnico en arboricultura y especialista en palmeras, describió los sistemas de aplicación de nematodos y agroquímicos en palmeras. Se detallaron tanto los sistemas de ascenso de palmeras, la instalación e interés de los sistemas fijos, así como el uso de pértigas o el empleo de la endoterapia como tratamiento curativo. Por último, se expusieron las técnicas de poda y cirugía para la recuperación de palmeras afectadas por parte de Pedro Hernández, especialista en palmáceas de viveros Lucaplant.

La última intervención corrió a cargo de Jorge Hernández, del Dpto. de I+D+i de Biobest Sistemas Biológicos, quien profundizó en el manejo integrado de plagas en parques y jardines.

Durante la tarde del jueves y gran parte de la mañana del viernes todas estas técnicas fueron  puestas en práctica sobre palmeras de la Estación Experimental de la Fundación Cajamar, para su mejor comprensión.

SOBRE EL PICUDO ROJO

EL Picudo rojo (Rhynchophorus ferrugineus) es un coleóptero curculionoideo originario del sudeste asiático que se ha transformado en el principal problema  de nuestra palmeras, ya que vive a costa de ellas. En todos los casos los daños ocasionados por el ataque del Picudo rojo conducen a la muerte de la palmera afectada, si no se realiza ningún tipo de tratamiento o control, dada la elevada población que la coloniza. Estos daños son producidos fundamentalmente por las larvas que se alojan en el interior de la palmera y se alimentan de los tejidos más tiernos, mientras que los adultos son los encargados de la multiplicación reproductiva y la colonización de nuevos ejemplares, pues tienen capacidad de mantener vuelos sostenidos de varios kilómetros (entre 4-5 km).

En nuestra zona muestra especial predilección por la palmera canaria y la datilera, aunque también se han constatado casos de infestación de palmeras whasingtonias. Este insecto vive y se alimenta en el interior de las bases de las hojas y en el interior del tronco, por lo que es difícil de detectar incluso mediante inspección visual exhaustiva. En una palmera el Picudo rojo se puede encontrar bajo cuatro formas diferentes: huevo, larva, pupa (capullo) y adulto. En nuestro clima, el Picudo necesita de tres a cuatro meses para completar el ciclo de huevo a adulto, por lo que se pueden esperar al menos tres generaciones anuales. Si se tiene en cuenta que la hembra puede poner entre 300 y 400 huevos, la capacidad reproductiva y por tanto de colonización de este insecto es enorme. Dentro de una palmera se producen varias generaciones de Picudo rojo, por lo que en cualquier época del año se pueden encontrar en la misma todas las formas descritas del insecto.