Al respecto, Iglesias ha recordado cómo «es normal ver en los supermercados ofertas, por ejemplo, de dos cartones de leche por el precio de uno, por lo que se vende por debajo de los costes de producción, algo que también es ilegal y no controlan». Lo cierto es que los agricultores y ganaderos están indignados. La Comisión de Agricultura de la Unión Europea (CE) y el Parlamento Europeo (PE), como ha explicado Iglesias, «aconsejaron a los países miembros que elaboraran contratos de compraventa entre los productores y la comercialización, que fijaran los plazos de pago y pusieran unos precios de referencia para que el agricultor y el ganadero se hicieran una idea de cuánto iban a cobrar». Sin embargo, el sector lácteo, que ha sido el primero que ha intentado que entre en vigor la normativa en España, ha perdido la batalla en sus primeros pasos. Y es que la Comisión Nacional de la Competencia, como ha alertado Iglesias, «ya ha asegurado que de llegar a algún tipo de acuerdo entre productores y comercializadores para fijar precios de referencia los denunciarían por ilegal». La secretaria general de UPA-Almería considera, asimismo, que lo más oportuno sería que, dado que la CNC pertenece al Ministerio de Hacienda, éste «tomara ejemplo de la vecina República de Francia y eliminara de la competencia de este organismo todo lo que tenga que ver con la agricultura y la ganadería». Ello significa, como no podía ser de otra manera, que los productores agrícolas y ganaderos españoles están en desventaja con respecto a los franceses. El hecho de que España no asuma la normativa comunitaria al respecto, que lógicamente es de mayor rango, llevó el pasado miércoles día 6 a la organización agraria UPA a manifestarse frente a las puertas de la Comisión Nacional de la Competencia. Al respecto, el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, ha asegurado que «la Comisión Nacional de la Competencia realiza una interpretación errónea de la normativa europea». Asegura, asimismo, que «en lugar de ser un instrumento que ayude a los segmentos débiles de la cadena en su relación comercial o que luche contra los abusos de posición dominante, la CNC se ha convertido en una seria amenaza para los sectores que están poco vertebrados y estructurados». Del mismo modo, desde la organización agraria le demandan al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que sea «ambicioso regulando las prácticas comerciales abusivas, implantando un código de buenas prácticas y permitiendo negociar precios de referencia que figuren en contratos de obligado cumplimiento». UPA se ha reunido, además, con grupos parlamentarios, ya que, como ha explicado Iglesias, «desde la CNC nos aseguraron que debería cambiar la legislación para que ellos actuaran de otra manera». Lo cierto es que la situación para muchos agricultores y ganaderos españoles es, sin lugar a dudas, trágica. La renta agraria real total ha descendido en los últimos seis años un 28 por ciento y todo apunta a que continuará en esta senda de decrecimiento durante los próximos meses.

Rafael Villegas